Elecciones en Estados Unidos
Durante décadas, el estado de Ohio en el medio oeste ha sido uno de los clásicos referentes de las elecciones en Estados Unidos.
Cualquiera que sea el candidato que gane allí, generalmente podría esperar ingresar a la Casa Blanca. Sigue siendo cierto que ningún candidato republicano ha asumido la presidencia sin ganar Ohio.
En 2016, se movió con creces hacia Donald Trump: ganó allí por un claro 8 puntos porcentuales con promesas de revitalizar el estado y recuperar sus desaparecidos empleos industriales.
Este año, esos mismos votantes regresan a las urnas en medio de crecientes casos de Covid-19, una economía en decadencia y escasa evidencia de que la industria regrese. Oliver Laughland, de The Guardian, visita la ciudad de Youngstown, donde los partidarios del presidente todavía tienen una gran confianza a pesar de que el estado parece ahora demasiado cerca para llamar.
Para John Russo , coautor de Steel Town USA: Work and Memory in Youngstown, existe evidencia de que los votantes de la clase trabajadora están abandonando a Trump en medio de promesas incumplidas y un creciente sentimiento de resentimiento y desvinculación con la política.
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