La historia de Ted Ngoy, conocido como The Donut King, es una de éxito, superación de las adversidades y perseverancia. Todo comenzó muy joven cuando pertenecía a una familia muy humilde y se enamoró de Suganthini Khoeun, una joven estudiante hija de un alto funcionario de Camboya. Todos los niños estaban enamorados de ella y Ted pensó que no tenía oportunidad de acercarse.
The Donut King y cómo pasó de la pobreza a la riqueza
Ted Ngoy, conocido como The Donut King, pasó de la pobreza a la riqueza, y no una, sino dos veces. Así es su historia

The Donut King ha vivido una historia de superación y de recuperarse de momentos en los que parecía estar acabado
Pero encontró la manera de hacerlo, descubrió que vivía en frente de la casa de la joven y comenzó a tocar la flauta todas las noches para llamar su atención: "Ella era poderosa, como una princesa real", recuerda el empresario. Estuvo durante largo tiempo tocando la flauta hasta que un día se animó a lanzarle una piedra con un papel en el colegio y contarle de sus sentimientos. Durante semanas esperó respuesta y no la tuvo, hasta que uno de los sirvientes de la chica apareció en su casa y le dio una nota en la que decía: "Te agradezco que toques la flauta. Es tan asombroso, tan conmovedor". Ahí comenzó el intercambio de mensajes entre los jóvenes.
Un día el atrevido Ted decidió trepar en su ventana, lo logró y se quedó escondido en la habitación durante 45 días. En ese transcurso de tiempo la joven también le declaró su amor correspondido. La familia de Suganthini veía mal esa relación y le pidieron terminarla, no lo hizo y más bien escaparon juntos hacia Estados Unidos. llegaron a California con sus tres hijos, un sobrino adoptado y dos sobrinas.
Ahí comenzó a trabajar en dos lugares diferentes, incluso hasta 17 horas al día, y alguien le recomendó hacer un curso dictado por la cadena de donas Winchell's. Ted asegura: "Aprendí a hornear, a ocuparme de la nómina, la limpieza, las ventas, todo". Con el tiempo pudo adquirir una de las sedes de la venta de donas donde trabajaba, Suganthini era la cara en el mostrador y toda la familia se involucró en la venta de donas hasta que crearon un imperio: "Logré mi sueño americano", dice Ted.
La segunda caída y levantada:
En el año 1977 por primera vez el empresario viajó a Las Vegas para ver un show de Elvis Presley, lo que hubiese marcado el encuentro entre The King of Rock And Roll y The Donut King. Fue en ese viaje, que por primera vez apostó en los casinos, algo que le trajo consecuencias en los años siguientes.
Desde ese primer viaje, The Donut King empezó a visitar mensualmente Las Vegas para ver todo tipo de espectáculos, aprovechando su éxito económico para apostar cada vez más dinero. Se volvió una figura reconocida como lo narra un perfil que Los Angeles Times hizo para él en el año 2005.
Su hábito de apuestas le trajo problemas familiares y su clara adicción se volvió un tema de peleas constantes entre él y su esposa. Sin embargo, esto no hizo que él dejara de visitar los casinos. A veces, contó llegó a falsificar la firma de ella para retirar dinero de la cuenta bancaria conjunta y hasta llegó a pedir dinero a parientes.
The Donut King quien en su momento era un modelo en la comunidad camboyana en los Estados Unidos, empezó a ser evitado por miembros de esta que tenían miedo que les fuese a pedir dinero prestado. Fue en ese momento que decidió acudir a Apostadores Anónimos, aunque en el artículo asegura que esto no le ayudó.
En 1990 tuvo una pérdida tan grande que lo llevó a aislarse un mes en un monasterio budista en Washington D.C, pero una vez regresó a California, volvió a apostar.
Eventualmente, The Donut King logró controlar su adicción por las apuestas, aunque para el momento en el que publicaron el artículo reconoció que todavía temía recaer.
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